No era el
hombre más honesto ni el más piadoso, pero era el más valiente, si bien estas palabras se
refieren al Capitán Alatriste siempre he pensado que se ajustan más a su
creador, el escritor español Arturo Pérez-Reverte (Cartagena 1951). Periodista
de guerra durante veintiún años y testigo de lo mejor y lo peor de la humanidad,
no tiene reparos en plasmar en sus letras su verdad dura y desnuda chocando
muchas veces en este mundo de corrección política extrema.
Sus libros son fiel reflejo de esta
concepción de la vida. Sus personajes son fuertes, fieros y sedientos de
aventura, no son héroes inmaculados (muchos
de ellos cometen acciones repudiables) pero
a la vez son íntegros y coherentes a su manera, son simplemente sobrevivientes
de una época dispuestos a hacer lo que sea con tal de ver un nuevo amanecer.
Esta noche no
quiero que me maten,
es la primera frase de Eva (Alfaguara 2017), la nueva aventura de Lorenzo Falcó.
Para quienes ya leyeron su primer libro Falcó, sabrán que esta serie narra las
aventuras de este espía durante la Guerra Civil Española trabajando para los
nacionalistas (aquellos militares que encabezados por Franco dieron el golpe de
Estado contra la República el gobierno democráticamente elegido) y que
necesitaban hombres como él, inescrupulosos pero valientes, dispuestos a todo con
tal de lograr sus objetivos.
Esta nueva entrega nos llevará hasta
Tánger, territorio neutro (con cierto toque a Casablanca) donde deberá
recuperar un encargo importante para la victoria nacionalista para ganar la
guerra. A diferencia del primer libro que se desarrolla totalmente en España,
acá nos adentramos a otros países y a su concepción sobre el conflicto, tomando
parte algunos de manera disimulada y otros directamente.
La clave para hacer una buena secuela,
cosa muy difícil donde muchas obras fallan, consiste en expandir el universo de
la primera parte sin perder la esencia y Pérez Reverte lo consigue de manera
brillante. Falcó sigue siendo ese hijo de puta encantador que ya conocimos,
hombre sin escrúpulos, tan capaz de seducir mujeres casadas como de asesinar a
quien se oponga a sus objetivos, pero lo conocemos un poco mejor. Un factor que
ayuda es que en esta entrega podemos ver a Falcó pero desde el punto de vista
de los otros personajes, desde la relación casi filial que tiene con el
Almirante, la que tiene con su compañero Paquita Araña, la de amante (que
descubriremos gracias a un nuevo personaje) y la de amor-odio con Eva.
Este personaje merece mención especial.
Ella es el perfecto contrapunto a Falcó. Allí donde vive por y para sí mismo,
Eva es el dogmatismo, el creer en una causa por la cual vale la pena dar la
vida. Falcó la admira y al mismo tiempo la detesta porque sabe que a la larga
las ideologías y las banderas cambian con el tiempo y los mismos jefes que te
dan palmaditas en el hombro pueden fusilarte si ya no eres de utilidad. Ambos
son las dos caras de una misma moneda de una época (como todas) turbulenta y
caótica.
Arturo Pérez-Reverte lo ha logrado de
nuevo. Ha creado una nueva aventura que no podrán dejar de leer, que atrapa
desde el inicio hasta la última palabra. Un libro que les mantendrá con el
corazón en la boca hasta saber si Falcó logrará cumplir su misión. No dejen de
leerlo, Lorenzo Falcó, Chesca Prieto, el Almirante, Paquito Araña y Eva los
estarán esperando.
------------------
Post scriptum con spoilers
NO LEER ESTA PARTE HASTA HABER TERMINADO
EL LIBRO
(El que avisa no es traidor)
No hay comentarios:
Publicar un comentario