sábado, 12 de mayo de 2012

29


Siempre he sentido una extraña fascinación por el número 9. Es el final del camino, la terminación, la quema y muerte. Quizá estoy predeterminado desde mi nacimiento por ese número: Mi nombre es Tulio que en la tabla periódica se representa como el elemento Tm69, en donde el 69 siempre me han parecido un par de culebras que se muerden la cola en un eterno ciclo  de amanecer y ocaso,  en  un permanente encuentro.

Estoy cumpliendo hoy 29 años. No tendría un significado especial si no me hubiera cogido en una situación específica. Me encuentro en un momento crucial de mi vida. Ciertos acontecimientos me han sacudido como nunca antes me había ocurrido y creo que después de tanto tiempo es hora de despertar.

Más de la mitad de mi vida me he quejado de quien soy, de lo que me conforma, de mi situación, y me he excusado detrás de una de una baja autoestima para no hacer absolutamente nada por cambiar mi destino. Fruto de ello he perdido cosas que son muy queridas por mi y que es probable no vuelvan jamás. Más allá de eso me he perdido de lo bueno que tiene la vida y me mantengo en las sombras no porque nadie me obligue sino porque así mismo lo deseo.

Este deseo de autodestrucción ha ido aniquilando mucho de mí, me ha reducido a una simple marioneta de quien deseo ser, me ha convertido en una carga no sólo para quienes alguna vez me amaron sino para mí mismo, me he convertido, en pocas palabras en mi peor y más desalmado enemigo.

No vale la pena quejarse, ni llorar por lo que se hizo o no, es hora de asumir las riendas de mi destino. De enfrentarme a la vida y no seguir siendo su esclavo. La vida es sólo una y hay que gozársela siempre con valentía, siempre estando dispuestos a enfrentar a nuestros propios demonios por más miedo que tengamos.

Porque esa es la batalla que no se puede perder. No se puede ceder ante el miedo de hacer las cosas. Es inaceptable rendirse antes de luchar porque tenemos miedo a vivir nuevas cosas, miedo a entregarnos, a correr el riesgo de lastimar o ser lastimados, a conocer nuestro destino con la frente en alto. Esa no es una excusa válida. No se puede ser tan cobarde.

Gracias Batman...supongo


Es hora de la verdad. De dejar de ser tan pusilánime y conformista, de buscar ‘algo más’ que es lo que conforma la vida. Esta es mi existencia  y no la estoy viviendo como la quisiera pero no es culpa de nadie más que no sea yo. Es hora de asumir las culpas y aprender de los errores, las pérdidas que han acarreado y levantarse y seguir el camino, siempre adelante, siempre hasta el final.

Creo que lo más importante que debo hacer ahora es cambiar mi pensamiento. Me ha regido por demasiados años por el pesimismo y la desesperanza, no creo que sea uno de esos idiotas del new age para quienes todos es  hermoso y precioso, pero si es hora de ser un guerrero, de llenarme de expectativas y luchar por lo que quiero.

Para ello debo empezar a rodearme de cosas que me ayuden a salir adelante. Debo salir del cuartico de mierda donde vivo porque vivir allí me hace una persona mediocre y conformista, abrirme al mundo, encontrar un lugar en el que me sienta cómodo, donde pueda escribir hasta el amanecer sin pensar en un mañana; también debo armarme de mayor carácter, dejar de ser tan débil y elevar mi voz si no estoy de acuerdo con las cosas, cuidarme más, alimentarme mejor, hacer ejercicio, vestirme mejor y esperar que mi exterior refleje el fuego que hay en mi corazón.

No me arrepiento de amar como lo hago.  Creo que no hay nada más maravilloso que entregarse por completo a una causa, a una persona, darlo todo en el sendero sin guardar energías para el regreso y sin importar cuantas veces se rompa el corazón o los sueños parezcan tan lejanos en el camino. Mi amor es sincero, genuino y lleno de pasión pero le hace falta algo, quizá la magia necesaria, recordar día a día que quien no ama, quien no sueña no está vivo y por lo tanto estar en constante creación o búsqueda de ese amor.

Ahora sé qué y a quién  amo y estoy dispuesto a luchar por ello hasta el final. Conquistándolo  a punta de corazón, magia y  una canción en los labios, estando dispuesto a luchar contra negativas y miedos pero siempre convencido de que el resultado final valdrá completamente la pena.

Gracias a todos los que me han acompañado en estos años, a los de siempre que me hacen crecer día tras día, a lo que ya no están y tomaron otros senderos pero dejaron una huella indeleble en mi corazón, a mi familia porque a pesar de sus defectos jamás podría haber pedido una caótica reunión de personas dispares más perfecta, soy lo que soy gracias a ustedes. Finalmente gracias a ustedes quienes leen estas líneas porque han hecho realidad mi mayor y único sueño: El de compartir cuentos, historias, pensamientos y mi alma a través de las letras.

Gracias y el show debe continuar….

3 comentarios:

  1. Recuerda siempre, mi buen amigo de batalla. Sos Turin Turambar, Cazador de dragones. Asi que siempre adelante. Que la sabiduria de manwe, la fuerza de melkor y la pasion de Eru te acompanen. Se que sos capaz de entender el comentario. Feliz cumpleanos companero. Sorry problemas con al ene en el portatil.

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  2. ¡Felicidades, Tulio!
    A la vida hay que encararla con todo, como mosca contra el vidrio. Con optimismo pleno tode el tiempo que se pueda (todos sabemos que el optimismo pleno, 24 horas por día, 365 días por año, no existe).
    Es difícil, pero no hay que aflojarle.
    Un abrazo.

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  3. Felicidades muy atrasadas, Tulio!
    Hay cumpleaños felices y menos felices, de eso supongo que todos sabemos en mayor o menor medida. Se te lee fuerte y con determinación, y esa es la clave para conseguir lo que uno quiere.
    Show must go on!
    Un beso!

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